Dicen que un nuevo comienzo es simplemente el final de un algo anterior. Dicen que el final de un algo anterior es un prometedor comienzo. ¿Y qué es mejor? ¿El final que se convierte en comienzo? ¿O el comienzo que recuerda al final?
Lección número 1: let it go. Hay cosas que deben pasar, marcharse. Cosas que debes saber dejar pasar, mientras aprendes a agarrarte a otras. O a veces debes decidirte por una tercera opcion: no agarrarte con demasiada fuerza a nada, flotar en el aire, disfrutar de todas y cada una de las oportunidades, todas y cada una de las locuras, para después poder aterrizar y decidirte por algo a lo que aferrarte otra vez.
El ser humano vive, respira, siente. No puedes no sentir, no puedes no querer, no puedes no desear, no puedes no existir. Pero a veces puedes escapar por un ratito, ser libre de todas esas redes, puedes llegar a distanciarte por un momento de todas esas cosas. ¿Merece la pena? Quien sabe... Puede que si, o puede que no. Si no lo intentas nunca lo sabrás.
Los nuevos comienzos nos dan la oportunidad de elegir cómo queremos que siga la historia. ¿Qué eliges tú?
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